JUAN PABLO

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JUAN PABLO 11 ,EL SANTO DEL MOMENTO

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SAN FRANCISACO DE ASÌS

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SAN FRANCISCO

SAN FRANCISCO
POR VALLES Y MONTES

PAISAJE

PAISAJE
BELLISIMO

JUAN PABLO 2DO ,BESA LA TIERRA DOMINICANA

JUAN PABLO 2DO ,BESA LA TIERRA DOMINICANA
EL PATRON DE LOS JOVENES

miércoles, 27 de octubre de 2010

SI QUIERES VIVIR ALEGRES UN CONSEJO YO TE DOY

 Si quiere vivir alegre un consejo yo te doy que has de vivir en gracias y alcanzar la salvaciòn ,que has de vivir en gracias y alcanzar la salvaciòn .


Jfrista Noble y honradi valiente y trabajador

miércoles, 20 de octubre de 2010

LAMENTAMOS LA MUERTE DE UN SACERDOTE EN PERÙ

Lamentamos de sobremanera la muete de un Sacerdote y su asistente en la Republica del Perù.
Los Franciscanos de la Republica Dominicana ,piden a Dios por el Sacerdote ,desde hoy rezaremos porque cese la violencia en el Mundo ,pedimos a Dios que salga a flote la verdad y que los matadores se entreguen a la justicia,

domingo, 3 de octubre de 2010



Cantos con Arcordes (IV)

domingo 03 DE OCTUBRE 2010

JUFRANOS DE SANTO CURA
G D Em Bm F C D
El don de la fraternidad, regalo del Señor. (2)
G D Em
Que hay que cuidar día a día,
Bm F C D
hay que cuidar con amor. (2)

HERMANO LOBO

C G7 C
Por qué te volviste lobo talvez no te ame bastante,
G7 C
por qué te volviste lobo talvez no te supe amar.

F G7
Por qué con rencor me acechas y quieres
C Am Dm
morder mi mano, talvez yo no fui tu hermano y
g c
nunca te abrí mi hogar.

C G7 C
Por qué tu nos odias tanto, talvez yo te odié primero.
G7 C
Por qué nos acosas fiero, talvez te enseñé a acosar.

C G7 C
Por qué vives en tinieblas, talvez te negué mi lumbre
G7 C
y toda tu pesadumbre nació de mi crueldad.

C G7 C
Hoy vengo a llamarte hermano y darte la paz y el bien.
G7 C
Hoy vengo a llamarte hermano y juntos volver a amar.

C G7 C
Los hombres a veces somos más fieros que el lobo fiero.
Am Dm G C
Hoy darte la mano quiero y abrirte por fin mi hogar.
HERMANO SOL

C G C G
A tu paso alegras el cielo y nos traes luz y calor,
F G C Am Dm G C
por tu sol de alegre vuelo, Loado mi Señor.

C G C G
Te deslizas por las laderas y en los campos pintas verdor,
F G C Am Dm G C
por tus luces placenteras, Loado mi Señor.

G F G C
Hermano Sol, tú nos traes alegría
G F G C Am
y del Señor, el amor, por tu nuevo día,
Dm G C
Loado mi Señor.

C G C G
Tu maduras frutos y mieses y a las flores das el color,
F G C Am Dm G C
por el paso de los meses, Loado mi Señor.

C G C G
En los campos haces fecundos los sudores del labrador,
F G C Am Dm G C
que dan pan a todo el mundo, Loado mi Señor.

C G C G
No distingues malos y buenos, para todos es el calor,
F G C Am Dm G C
quieres tu que nos amemos, Loado mi Señor.

C G C G
Con tu manto todos los días, pobre y rico cubren dolor,
F G C Am Dm G C
aprendamos tu alegría, Loado mi Señor.

C G C G
Recorriendo la hermana tierra, a los hombres ves sin amor,
F G C Am Dm G C
por los que no quieren guerra, Loado mi Señor.

C G C G
Por aquellos que son pacientes y perdonan sin rencor,
F G C Am Dm G C
por la fe de los valientes Loado mi Señor.

HERMANA CLARA

D G A7
Clara es tu nombre, claro tu vivir
D
trigo tus cabellos, miel tu sonreír,
D7 G
Frágil como un mimbre, sed de eternidad,
D A7 D
Dios te da su fortaleza sol de claridad (Bis).

D A7
Clara, Clara, Clara, trigo, lirio y luz
D
Clara, Clara, Clara, Esposa de Jesús
A7 G
Clara, Clara, Clara, alma de cristal,
D A D
En invierno y en la nieve, floreció el rosal (Bis).

D G A7
Alma franciscana, llama de oración
D
búsqueda constante en tu sed de Dios,
D7 G
flor que nos ofrece la fraternidad,
D A7 D
Dios te da su fortaleza sol de claridad (Bis).

LLORANDO FRANCISCO

Em Am B7
Llorando Francisco, dijo un día a Jesús,
Em
amo el sol y amo la estrella

amo a Clara y las hermanas
Am
amo el corazón de los hombres
B7
amo todas las cosas bellas
Em Am Em
¡Oh, mi Señor, me debes perdonar
Am B7 Em
porque yo sólo a Ti debo amar!

Em Am B7
Sonriendo el Señor, le responde así:
Em
amo el sol y amo la estrella,

amo a Clara y las hermanas
Am
amo el corazón de los hombres
B7
amo todas las cosas bellas
Em Am Em
¡Oh mi Francisco, no debes llorar más
Am B7 Em
porque yo amo lo que amas tú!





DOS BUSCADORES DEL ABSOLUTO

C G7 C
Como el arroyo busca la mar, busco yo en mi inquietud.
G7 C
Todo mi ser ansía volar, busco tu plenitud (Bis).

F C G
Suenan dos voces como un cantar en mi
C F C
corazón, mira hacia el cielo, Dios es tu hogar,
G7 C
Clara y Francisco son.

C G7 C
Buscan los hombres en su dolor fuentes de juventud.
G7 C
Yo solo tengo sed de tu amor, busco tu plenitud (Bis).

C G7 C
Tú lo eres todo, Tú eres el bien, eres el sumo bien.
G7 C
Eres paciencia, eres quietud. Eres mi plenitud (Bis).



LAS HUELLAS DEL CRUCIFICADO

Am C Dm
Rosas de sangre han florecido, reviven en tu
g c e
cuerpo la pasión, Francisco de amor estar
Am E Am
herido, las manos , los pies y el corazón.

Am C E
Tus manos acogen a los pobres y parten su pan con el
Am C E F
mendigo, yo quiero también amar a todos ¡Ya puedes Señor,
E
contar conmigo!

Am C E
Sembrando la paz y el bien caminas y yo, sembrador iré a tu
Am C E F
lado. En ti el Evangelio es carne viva. Y Cristo otra vez
E
crucificado.









QUEREMOS

E A
Tu fuerza, tu violencia, tu coraje
B7 E A
Imprímenos, Francisco contigo
B7 A E
Gritaremos, no es amado el Amor, no es amado

E
Queremos la violencia de tus ojos
F#m E
y mirar dentro y fuera nuestro mundo
A B7
queremos el coraje de tu celo

y amar ciento por ciento
A E
a miles de personas que no saben amar.


Queremos el rigor de tu locura,

Para gritar en todas las ciudades,

Queremos el ardor de tu garganta

para gritar muy fuerte viva el amor,

la paz y la dulzura, y así siempre gritar:


Queremos la ternura de tus manos

Y bendecir el mundo que se agita,

Queremos la humildad de tus sandalias,

y caminar sin rumbo para ganar con diálogo las almas

Y enseñarles a amar.
















LAS HUELLAS DEL CAUDILLO ENAMORADO
(Himno del Terciario Franciscano)

Dm A7 Dm
Las huellas del caudillo enamorado
Gm Dm C Dm
sigamos con fervor. Vamos tras él, su voz ha
c a7 dm
resonado tremolemos la insignia del amor.
Gm Dm
Su sendero es de luz, fieles terciarios
A7 Dm Gm C
a Francisco seguid. Honor y bendición al Padre
F Gm A7 Dm
amante, honor y bendición al serafín.

Dm Gm Dm
En redes amorosas te viste prisionero. “Amor fue tu divisa, tu
Gm Dm C F C F
lema y tu ideal. Incendios respirando, trazaste el fiel sendero,
Dm A7 Dm
que muestra a los amantes divino manantial.

Dm Gm Dm
Tu corazón ardiente a Dios ha cautivado y sus divinos ojos
Gm Dm C F C
con gozo en ti fijó, y al verte en tales llamas dejástele
F Dm A7 Dm
hechizado y con flamante dardo tu cuerpo traspasó.

Dm Gm Dm
Divinamente herido te vieron los mortales y fueron a pedirte
Gm Dm C F C
lecciones de tu amor. Inmensas muchedumbres siguiéronle
F Dm A7 Dm
leales y a todas abrasaste con tu copioso ardor.

Dm Gm Dm
Tus ansias imitando seráficas legiones luchando por el
Gm Dm C F C
triunfo de Cristo y de su Cruz, iluminar queremos los pueblos
F Dm A7 Dm
y naciones con célicos fulgores de salvadora luz.

Dm Gm Dm
Al cielo los hermanos no tienden la mirada y en goces
Gm Dm C F
transitorios han puesto su afición. Por eso hoy emprendemos
C F Dm A7 JUFRANOS DE SANTO CURA  pidiéndote ¡Oh Francisco! Amparo y
Dm
protección.


VIDA DE SAN FRANCISCO DE ASÌS,EL MÀS POBRE DE LA IGLESIA

 San Francisco de Asís mostró que podía vivirse la verdad del Evangelio tal cual es
    Según vimos en los dos artículos anteriores, parte del Medioevo estuvo sacudido por movimientos heréticos que dejaron tan profunda huella en la humanidad que sus repercusiones las padecemos todavía. Sin embargo, en etapas de grandes conflictos aparecen grandes soluciones. Poco después de que se publicara el edicto de excomunión contra los valdenses, en 1182 nace uno de los más grandes santos de todos los tiempos: Francisco de Asís. Bautizado con el nombre de Juan, Francisco nació dentro de una familia rica y vivió una adolescencia y una juventud despreocupadas, cultivando los ideales caballerescos de su tiempo. A los veinte años tomó parte en una campaña militar y lo hicieron prisionero. Después de su regreso a Asís, comenzó en él un lento proceso de conversión espiritual que lo llevó a abandonar gradualmente el estilo de vida mundano que había practicado hasta entonces, fuertemente influenciado por su experiencia ante el mensaje del crucifijo de la iglesita de San Damián. Cristo en la cruz cobró vida ante él en tres ocasiones y le dijo: “Ve, Francisco, y repara mi iglesia en ruinas”. Este acontecimiento de escuchar la palabra del Señor en la iglesia de San Damián guarda un profundo simbolismo. En su sentido inmediato, Francisco es llamado a reparar esta iglesita, pero el estado ruinoso del edificio es el símbolo de la situación dramática e inquietante de la Iglesia en aquel tiempo, en la que se evidenciaba una fe superficial que no transforma la vida, con un clero poco celoso y con el enfriamiento del amor. Parecía que se trataba de una destrucción interior de la Iglesia que, con el nacimiento y proliferación de los movimientos heréticos de los que hemos hablado, trajo consigo una descomposición de la unidad en Cristo. Sin embargo, en el centro de esta Iglesia está el Crucifijo que llama a la renovación, que le pide a Francisco un trabajo manual para reparar concretamente la iglesita de San Damián, símbolo de una llamada más profunda a renovar la Iglesia de Cristo con su radicalidad de fe y con su inmenso amor al Evangelio.

    Se cree que este acontecimiento sucedió en 1205 --las fechas no son muy exactas, pues los cronistas de la época no lo mencionan con rigurosa precisión   -- y por su naturaleza, nos remonta al año 1207 en que el Papa Inocencio III tuvo un sueño especialmente significativo. Soñó que la iglesia de San Juan de Letrán, cuna de todas las iglesias, se derrumbaba; pero un religioso, pequeño e insignificante, sostiene la construcción en sus hombros para que no se desplome. Cuando Francisco y sus hermanos en Cristo visitan al Papa en 1209, éste reconoce en el Pobrecillo al personaje de su sueño. Aquí es importante reconocer que Inocencio III era un Papa poderoso y de enorme cultura teológica, pero no es él quien renueva la Iglesia, sino aquel religioso pobre y pequeño. Además, es todavía más importante entender que el hermano Francisco no renueva la Iglesia sin el pontífice o en contra de él, sino en comunión con él. Las dos santidades contemporáneas van juntas, el sucesor de san Pedro, la Iglesia fundada en y por la sucesión de los apóstoles, y el carisma nuevo que el Espíritu Santo inspira en la persona de san Francisco de Asís. Esta unidad es la que da nueva vida e inspiración a la Iglesia. El santo comprendió que todo carisma que da el Espíritu Santo debe ponerse al servicio del Cuerpo de Cristo que es la Iglesia, por lo que todos sus actos fueron realizados en plena comunión con la autoridad eclesiástica.

    San Francisco de Asís mostró que, a diferencia de los movimientos heréticos religiosos de su tiempo, podía vivirse la verdad del Evangelio tal cual es, sin separarse de la Iglesia. El Pobrecillo mostró que la Iglesia sigue siendo el lugar auténtico y verdadero del Evangelio y la Escritura. Este estilo de vida, adherido totalmente a las enseñanzas de la Santa Madre Iglesia, fue muy apreciado por todos los hombres de la época, quienes reconocieron en el Pobrecillo la presencia y la voz del Espíritu Santo. Así, cerca de la festividad de San Francisco, invoquemos al Espíritu Santo para que nos haga dar testimonio coherente y valiente del Evangelio para que nunca falte santos que hagan resplandecer a la Iglesia para que atraiga al mundo hacia Cristo, hacia su salvación. Que el Señor nos bendiga y nos guarde.

MARIA MADRE

MARIA MADRE
LA VIRGEN DE FATIMA